Sí, volví a Blogger, a mi viejo blog. Por eso ya no publico. Pero transferí todas las entradas de WordPress a Blogger, así que allí también aparece todo lo escrito en este blog. Si queréis seguirme allí, la dirección es
Garza real
Ayer, aún con la reciente visita (todavía fresca) que hice a la reserva de Blacktoft Sands con la uni, dibujé esta garza real (Ardea cinerea) con un bolígrafo BIC sin tapa que me encontré tirado por el cuarto de estar.
En Blacktoft Sands vi varias garzas reales, por eso me animé a hacer este retrato.
Mosquitero de Pallas en Flamborough
Hoy (17.10.2015) nos hemos acercado al Cabo Flamborough porque últimamente nos llegan muchas noticias de rarezas e invernantes escasos, y como está cerca de casa, hemos decidido probar. Sabíamos que había algunos mosquiteros bilistados (Phylloscopus inornatus) y de Pallas (P. proregulus), así como alguna tarabilla raruna. El Cabo Flamborough está muy expuesto a los elementos, y el temporal de hoy no hacía fácil la observación de aves. Aun así, las pequeñas aves que llegan de Siberia y de Escandinavia llegan aquí habiendo superado duras pruebas climáticas, así que para ellas esto es un respiro, porque encuentran refugio y alimento en setos y herbazales altos. Primero hemos visto un reyezuelo sencillo (Regulus regulus) en un seto de sauces… siguiendo un sendero y pasando por un pequeño y angosto puente de madera, luchando contra la fuerza del viento. hemos llegado a un prado junto al seto donde se agrupaba una manada de BBs (British Birders). Nos hemos quedado cerquita de ellos, porque además uno de los tuits de la cuenta @rbnUK decía lo siguiente:
E. Yorks: PALLAS’S WARBLER 2 this morning at Flamborough. In hedge near set-aside. #rbnEYK via @mhemingway25
— Rare Bird Network (@rbnUK) octubre 17, 2015
Y nosotros estábamos justo ahí. Así que persistimos bajo el temporal, hasta que, por fin, un pequeño pájaro bastante llamativo hizo acto de aparición entre las ramas rojizas de un sauce y las zarzas, algo nervioso y rápido, pero he tenido tiempo de verlo. La foto, como veis, no es muy allá. He decidido disfrutar de la presencia del mosquitero de Pallas sin preocuparme de hacer fotos, y cuando he creído conveniente, he disparado. Y así es como he bimbado este pequeño animal procedente de algún punto entre la remota Siberia y Mongolia…
En el castillo de Scarborough
Hoy nos hemos acercado a Scarborough y hemos dado un paseo por el interior de los terrenos del castillo derruido. Allí, entre las gaviotas en el cielo, nos ha sorprendido un halcón peregrino (Falco peregrinus) graznando.
También por allí volaba (bueno, más bien, se cernía) un macho de cernícalo vulgar (Falco tinnunculus), que fue atacado por una gaviota…
Visita a Spurn
Ayer (9.10.2015), fuimos a Spurn. La mañana fría junto al Mar del Norte se fue caldeando conforme avanzaba el día, pero muchas criaturas hicieron acto de aparición desde el principio.
Caminamos por un pasillo entre setos de espinos, donde se agrupaban jilgueros (Carduelis carduelis), gorriones comunes (Passer domesticus), verderones (Chloris chloris) y pardillos sizerines (Acanthis flammea), algún que otro petirrojo (Erithacus rubecula) y acentores comunes (Prunella modularis). Un individuo de zorzal alirrojo (Turdus iliacus) nos sobrevoló a toda velocidad. Junto a un estanque cercano, algunos individuos de cerceta común (Anas crecca) y una aguja colipinta (Limosa lapponica).
Entre las hierbas altas y las zarzas, se oía el canto de algunos grillos de matorral que iban acelerando su actividad conforme avanzaba el día. Caminando entre los setos, llegamos al borde de una playa. La hierba y las matas desaparecían conforme la naturaleza de la tierra cambiaba, de tierra rojiza a guijarros y arena. En el suelo, África descubrió un pequeño arácnido que nos cautivó…
La Arctosa perita es una araña lobo muy relacionada con hábitats arenosos que es bastante común en las costas británicas. Se distribuye por gran parte de Europa. Tras observarla durante un rato, seguimos caminando. Atravesamos una zona de caravanas bastante siniestra, donde una amarilla (Colias croceus), que, por lo visto, es una especie bastante difícil de observar en Gran Bretaña.
No muy lejos del agua, crecían muchos espinos de mar (Hippophae rhamnoides), arbustos que, cargados de suculentos frutos naranjas, reciben a las aves migratorias que se aproximan a las costas. En un momento determinado nos sobrevolaron unos grupos de ánsar piquicorto (Anser brachyrhynchus).
Poco después volvimos al camino entre los setos. El sol ya calentaba con fuerza, la temperatura debía superar los 15C y parecía que había más movimiento. Pudimos observar al grillo de matorral de Roesel (Metrioptera roeselli) en plena acción, estridulando sobre una hoja de zarza.
Poco antes de despedirnos de Spurn, echamos un vistazo a la playa. Junto al agua, en los limos, había algunos cisnes reposando y muchas limícolas, entre ellas, algún correlimos gordo (Calidris canutus) y archibebes comunes (Tringa totanus).
Polinizadores de principios del verano
Sigo publicando entradas atrasadas, «pasando a limpio» experiencias pasadas en el campo. Aquí va un pequeño paseo que hicimos Jess y yo al volver de Inglaterra, a principios de verano.
Hace unos días (15.06.2015), pude al fin pasar unos días en el pueblo. Hay una cuesta que lleva a la Sierra y, si uno la sigue, se termina llegando a la cima del Cerro de San Cristóbal. A los lados de esta carretera hay una variedad ingente de hierbas y arbustos pequeños, casi todas las hierbas son anuales. Algunas de las especies florecientes que más insectos atraen en esta zona son: Papaver rhoeas, Anacyclus clavatus, Malva sylvestris, Hypericum perforatum, Mantisalca salmantica, Centaurea aspera, Centaurea ornata, Scolymus hispanicus, Teucrium capitatum subsp. gracillimum, Sideritis mugronensis, Rosmarinus officinalis, Cistus albidus, Genista scorpius, Bituminaria bituminosa, Coris monspeliensis, Eryngium campestre, Thapsia villosa, Sedum album. Puede que esta retahíla de nombres científicos de plantas parezca que no sirve de mucho, pero en realidad sirve para poner en situación. Me sorprendió que una jara blanca (Cistus albidus) tuviera a esas alturas del año flores, a pesar del calor, y pude contar unas 6 ó 7, pero al encontrarse al otro lado de una valla de protección al borde de un precipicio, no pude acercarme más a algunas de ellas para examinarlas. Me di cuenta de que muchos insectos apreciaban sus flores, lo cual resulta un punto a favor de la planta.
Pero, sin duda, las estrellas de la zona eran los lepidópteros, y sobre todo las Argynnis pandora (o Pandoriana pandora). Decenas de ejemplares revoloteaban y planeaban sobre las flores y el bullicio invertebrado. Su tamaño supera con creces el del resto de los polinizadores que por allí pululaban. Imaginaos la cuesta junto al monte, rodeada de flores, con la banda sonora de los gorriones chillones y los colirrojos tizones, y el vuelo de esta mariposa, que aun teniendo unos 8 cm de envergadura, siempre atrae la mirada distraída del naturalista paseante.
Andaba, bueno, más bien, volaba por allí también una Issoria lathonia, otro ninfálido, especie que pocas veces he podido ver y que, por suerte, pude fotografiar en mi canchal favorito. Y no solo estas dos especies en el grupo de los lepidópteros. En un tramo del camino de menos de 20 m encontré estas especies:
Jess descubrió, entre una zamarrilla, un bonito ejemplar de plusia (Autographa gamma), descansando. También hubo tiempo para encontrar otros órdenes de insectos. Una enorme mosca cernidora o sírfido (me gusta usar las dos denominaciones) de la especie Volucella elegans se dejó fotografiar sobre una enorme inflorescencia de Thapsia:
Sobre una centáurea, el llamativo Mylabris quadripunctata se daba un festín digno de un patricio romano.
Lo cierto es que el sol calentaba de lo lindo, sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos, el cielo se nublo y empezaron a caer algunas gotas. Eran los últimos coletazos de la primavera mediterránea antes de dar paso al verano tórrido. Pegando saltitos, como la familia a la que pertenece muy bien indica, Salticidae, la pequeña araña Philaeus se paseaba en busca de algo que cazar bajo las plántulas de las cornicabras. Creo que la especie en concreto es P. jugatus.
Entre nubes de mariposas, abejas, moscas y avispas, seguimos caminando, en dirección a la cruz que hay a medio camino, señal de retorno para nosotros porque se nos hacía tarde. Aún nos dio tiempo a ver algunos e interesantes seres. Por ejemplo, unas moscas del género Hemipenthes.
Me llamó muchísimo la atención una invasión de Cuscuta envolviendo un grupo de plantas junto a una cuneta, hilos e hilos bermejos como si fueran lana ahogaban la vegetación.
En cuanto llegamos a la cruz, nos dimos la vuelta a paso rápido, siempre sin dejar de observar. Los gorriones chillones (Petronia petronia), tan comunes en los tejados de Chinchilla, se juntaban con sus parientes los gorriones comunes (Passer domesticus) junto al antiguo matadero.
Vale, ya sé que me he desviado un poco del tema de la entrada (polinizadores), pero no puedo dejar de lado algunas observaciones que amenizaron todavía más el paseo. Ya era tarde y había que hacer la comida, así que nos dimos prisa en volver a casa.
Lectura recomendada: Guía de los polinizadores de España, de Luis Óscar Aguado Martín, Alberto Fereres Castiel y Elisa Viñuela Sandoval. Libro de reciente aparación, esencial en la estantería del naturalista.
Aglais urticae (Linnaeus, 1758)
En busca de criaturas nocturnas
18.09.2015. Organizamos una salida nocturna con el grupo de Facebook Fauna y Flora de Albacete por la Sierra de Chinchilla, a la que se presentó nuestra amiga Laura Olivares. Salimos desde la zona de barbacoas caminando por el sendero para ver qué nos encontrábamos. El primer insecto que hizo acto de aparición fueron unas major de Camponotus pilicornis (Roger, 1859), una hormiga bastante común en Chinchilla y que identifiqué gracias al foro lamarabunta.org.
Pudimos disfrutar de los reyes de la noche, los arácnidos en varias ocasiones. Poco después de observar la Camponotus pilicornis, nos topamos con una pequeña Nomisia aussereri, especie común en la zona que ya he mostrado en otras entradas, pero vuelvo a poner otra foto aquí:
En medio del camino, se nos cruzó un sapo corredor (Epidalea calamita) que, haciendo honor a su nombre, se desplazó a grandes zancadas huyendo de la luz. No nos entretuvimos mucho con él y seguimos adelante en busca de arañas lobo. No recordaba que es justo a finales de verano y en otoño cuando las hembras de varios géneros de arañas lobo empiezan a dejarse ver con la prole sobre el abdomen. Ante nosotros se mostró una hembra de Hogna radiata en dicho estado. Caminando, se le cayeron varias crías del opistosoma, que supieron en contrar su camino de vuelta, imagino que por seguir enganchadas con un hilo de seda a la madre.
Poco después apareció la reina del suelo del bosque por la noche, la escolopendra común (Scolopendra cingulata), un ejemplar adulto bastante imponente…
Hubo también observaciones de Blaps sp. como siempre. También de algún grillo doméstico y cucarachas, pero, sin duda, la estrella de la noche fue un lagarto ocelado (Timon lepidus) que nos dio tiempo a inmortalizar para siempre en nuestras cámaras antes de huir bajo una gran piedra (refugio también de la única población de Uroctea durandi que conozco).
Por esta época aparecen dos insectos que pueden llegar a ser bastante comues localmente. Uno es la polilla Cymbalophora pudica, conocida porque muchas veces se la oye antes de ser vista, ya que generalmente emite un sonido chirriante cuando vuela. El otro insecto es el cerambícido o longicorne Vesperus fuentei.
Finalmente terminamos volviendo a la zona donde la mantis iris (Iris oratoria) suele esconderse y allí observamos a una hembra exhibiendo el comportamiento típico de alerta…
Día 5: un paseo
10.9.2015. Este día fue el más caluroso de todos, casi llegamos a los 30 C y el sol pegaba bastante fuerte, así que por la mañana decidimos descansar. Ni siquiera al gato le apetecía moverse ni jugar. Estuve observando los polinizadores que acudían a las flores del patio, aunque todavía no los he identificado.
Después de varios días trotando por los campos de Iberia, nos encontrábamos hambrientos y somnolientos. Decidimos planificar un pequeño paseo por la Sierra de Chinchilla para la tarde.
Sobre las cinco ya estábamos en camino. El día no fue bueno para bichear, pero encontré, bajo unas rocas cerca de las barbacoas, un nuevo caracol que no conocía: Xerocrassa subrogata (Pfeiffer, 1853).
Siguiendo el camino, nos fuimos desviando en busca de una abubilla (Upupa epops) que apareció de repente, y seguimos caminando sobre lomas y entre romeros y espartos hasta llegar a la Casa del Agua, que nos mostró una escena bastante desoladora, pues esta se encontraba prácticamente vacía. A pesar de las lluvias generosas, no sé cómo, dentro de la piscina, a la que no puede acceder la fauna, no había casi agua. Espero que fuera una cosa puntual, porque es una zona interesante. Acercarnos allí nos sirvió para encontrar un pequeño saúco (Sambucus nigra), creciendo entre los juncos churreros del agua que brota por la zona… No hubo grandes observaciones de fauna esta vez y acabamos muy cansados porque anduvimos bastantes kilómetros. Era el penúltimo día.
Joaquín Rodrigo – Fantasía para un gentilhombre, interpretada por John Williams